Las enseñanzas del oso Baloo
Los animales son unos grandes maestros. Su cercanía con la naturaleza nos permiten acceder a su profundo conocimiento del universo. Baloo, un osito regordete, tiene experiencia viviendo la vida.
Bueno, por si no lo sabes (que me sorprendería), Baloo es un personaje de la película de Disney «El libro de la selva». Mowgli, un «cachorro» humano criado por lobos, aprende a vivir de la mano de su maestro Baloo.
Estas son algunas de las enseñanzas que, ahora de adulto, tienen muchísimo sentido.
Lo más vital
Si yo fuese un animal de la selva, definitivamente no tendría muchas opciones para comprar cosas materiales. Ya vez, el pobre Mowgli andaba con taparrabos y era muy feliz.
Baloo nos dice que lo más vital es lo mismo que definir qué cosas son lo que realmente necesitas para poder vivir. Cuando mantienes en tu vida lo esencial, tus preocupaciones se reducen inmediatamente.
¿Quien iba a pensar que Baloo practicaba el minimalismo?
Ser minimalista no significa que tu casa se encuentre completamente vacía (aunque se los recomiendo). El minimalismo te permite poseer lo que es más importante para ti: lo más vital.
Siempre estamos buscando comodidad. Vamos de una zona de confort a otra. Lo único que deseamos es tener una vida sencilla y feliz.
Los estándares sociales nos indican cómo deberíamos encontrarnos. Sin embargo, dichos estándares están enfocados a que consumas, y vivir en el mundo extremo del consumismo crea mucho estrés.
Así que ya sabes, quédate sólo con lo más vital.
Oso dichoso, oso feliz
Baloo también es un maestro del positivismo, pero no de esos que te piden que recites miles de veces la frase “soy feliz” y eventualmente serás feliz. Esas son tonterías.
El positivismo de Baloo te invita a ver lo bueno de las cosas que te suceden. Las situaciones de nuestra vida no son blancos o negros, son grises. Esto quiere decir que siempre habrá algo bueno detrás de lo malo, y viceversa.
La compasión hacia el resto de los seres es elemental para poder lograr ver con positivismo cada situación. Cada uno de nosotros pertenecemos a una cadena, somos eslabones que permiten que la cadena se encuentre unida y «jalemos» para el mismo lado.
Cada elemento que rodea nuestra vida está ahí porque realiza una función específica.
Las abejas por naturaleza producen miel, pero Baloo creía que la creaban exclusivamente para él. No es que se sintiera como el centro del universo, sólo creía que el universo las puso ahí, como eslabón de cadena, para que él pudiera vivir.
Nunca del trabajo hay que abusar
Vatos y morras, queridos lectores, ¿por qué se obsesionan con el trabajo?
Estoy de acuerdo que nos gusta el dinero y el poder, pero si nos vamos al extremo, nuestro trabajo se convierte en una prisión.
Además de que está más que comprobado que el estrés generado por el trabajo trae repercusiones físicas (¿a dónde se fue todo mi cabello?) y así como nuestra salud se ve afectada, nuestro aspecto preocupa a más de uno.
Esto nos lleva al primer punto: busca lo más esencial. Trabajar no es malo. Repitan conmigo: trabajar no es malo. Obtén lo que necesitas del trabajo y sigue viviendo.
Sí, te estoy diciendo que uses al trabajo para obtener beneficios. Dinero, seguros médicos, cursos, desarrollo profesional, reconocimientos, descuentos, estabilidad financiera y un etcétera más.
Eso es el trabajo: te hago ganar mucho dinero, pero tú me das buenos beneficios para que mi vida sea más sencilla. Lo esencial, no más.
Mamá naturaleza te lo da
Algunos le llaman Dios, otros Universo, otros alma, otros energía o destino. Baloo como no fue conquistado por ninguna civilización europea, creía firmemente que Mamá Naturaleza es la responsable de poner todo lo que necesitas en tu camino.
Yo no creo en la ley de la atracción, pero creo en el mantra de «A la chingada». Un poder liberador se hace presente cuando dejas de preocuparte, de ambicionar, de tener deseos y apegos.
El agua no va preocupada del destino cuando baja por un río. Simplemente fluye. No sabe a dónde llegará, pero sabe que llegará. ¿Ves la diferencia?
Lo más vital para existir te llegará.
Baloo
Publicado originalmente en chrislogar.blog el 3 de Enero del 2019.
